sábado, 23 de febrero de 2008

HUNGRY SAW: EL REGRESO DE TINDERSTICKS

Hay veces en las que nos olvidamos de manera consciente de momentos y experiencias difíciles de la vida, y sin previo aviso, vuelven con fuerza para recordarnos quienes somos. Esto me ha sucedido hoy al descubrir que Tindersticks vuelven con la publicación de un nuevo disco, “Hungry Saw”, y he sentido la necesidad de escuchar sus antiguas grabaciones (cosa que no hacía desde hace mucho tiempo), y envolverme en la tristeza y melancolía de su música y volver a sufrir...

Desde 2003, año en que publicaron “Waiting for the moon”, álbum algo irregular pero en el que se encontraban maravilloso temas como “Until the morning comes”, el grupo se tomo un descanso en el que su cantante Stuat Staples aprovecho para publicar dos discos en solitario. Han tardado cinco años en volver a grabar nuevo material, pero la espera ha merecido la pena. Hungry saw se abre con un instrumental llamado sencillamente “Intro”, en el que a unas desnudas notas de piano van añadiéndose el resto de instrumentos suavemente, creando una hermosa melodía que te predispone a abrirte a la difícil e intensa voz de Stuart en “Yesterday Tomorrows”, clásico tema de la banda, con el ritmo pausado de su música, sus crescendos, sus silencios, sus violines, sus trompetas... y continuar a lo largo de un disco que encierra unas cuantas joyas sublimes (“Mother dear” y “Boobar”, y especialmente “The other side of the world”) que te encogen el corazón y te estremecen.



Puede que el grupo no sorprenda ni gane nuevos adeptos ni haga cambiar de opinión a sus detractores con este nuevo disco, pero sin duda hará felices a todos aquellos que nos enamoramos con “Curtains”, que pensamos que Tindersticks es uno de los grupos más elegantes, emocionantes e intensos de la actualidad, y que su música es de una belleza y delicadeza insuperables. En definitiva, un disco enorme.



Escucha "Can we start again", uno de sus grandes clásicos

1 comentario:

monsieur august dijo...

Qué post tan oportuno querida Lady. Ya sabemos que la tristeza no es un lugar para quedarse pero pasear por ella de vez en cuando nos hace sentir más nosotros mismos. Por mi parte es bienvenidos este nuevo y brillante trabajo de Tinderstikcs