sábado, 14 de febrero de 2009

GOOGLE EARTH: VIAJAR EN TIEMPOS DE CRISIS

Cuando hace unos 4 años se lanzó Google Earth pensé: Dios mío, esto es la forma de viajar para pobres y desde luego Google no me ha defraudado.

Al principio Google Earth servía para poco más que para satisfacer la curiosidad de ver tu casa desde el cielo o comprobar qué bloques vecinos tenían piscina y cuales no. Lo de ver los pueblos era más complicado porque con la definición que tenían rápidamente se convertían en un manchurrón en la pantalla.

Sin embargo, rapidamente el boca a boca funcionó y todos nos volvimos frikis perdidos buscando la vista de las pirámides desde el cielo o cómo eran realmente el Ártico o la Antártida y la cosa creció con las notas de la gente que marcaban puntos de interes, las notas de la Wikipedia o los datos de cada ciudad.

Lo de ver las constelaciones nunca me convenció, porque lo único que te pillabas era un mareo de impresión dando vueltas por el cielo y como mi vida siempre ha transcurrido bajo cielos contaminados apenas distingo la Osa Mayor y la Estrella Polar.

La siguiente revolución fue Panoramio. Ahora no sólo veías las cosas desde el cielo sino que cualquier rincón contaba con una foto que ilustrara el lugar. El éxito fue tal que los inventores (creo recordar que unos chavales alicantinos) están forrados por los cuatro costados.

Qué decir también del tiempo mundial en directo. Yo abro mi Google Earth y sé la climatología de Dublín o el tiempo que sufren mis compañeros de redacción sin moverme de mi escritorio, las predicciones a varios días, veo las nubes avanzando e incluso la lluvia con la opción radar.

Bueno, hasta aquí parecía que la fórmula no daba para mucho más, pero entonces llegó Sreet View y la revolución. Imagino que como todos, conocí el Street View en su versión Google Maps como una especie de callejero fotográfico de QDQ, pero nada más lejos de la realidad. Street View es para verlo en Google Earth.

Un buen día necesitaba por motivos laborales unas fotos de una rotonda y me dirigí a Google Earth pensando que igual Panoramio me ayudaba, cuando vi en la barra de la izquierda la opción Street View. La seleccioné y al momento aparecieron unas esferas todo a lo largo de la calle. Pinché una esfera y literalmente la pantalla me dirigió dentro de ella: OOOOHHH era como una foto tridimensional en la que podías moverte, acercarte y reproducir el movimiento natural de los ojos: mirar a los lados, arriba y abajo y así toda la ciudad punto por punto con una calidad más que aceptable. Lo primero una vez más (el ser humano es así) es ver tu casa y si te han sacado en la foto tendiendo ropa como una maruja, pero esto realmente daba para mucho más...

¿Qué pasó? que me quedé literalmente atrapado varios días recorriendo las calles de Tokyo, New York, París, Roma... y no es como ver fotos de un sitio, no; recorres lo que quieres mirando lo que quieres. Ahora soy como la niña aquella del anuncio de la Playstation que sin salir de su barrio había visto de todo. He visto las reformas del 22@ en Barcelona, el Palazzo de la Civiltá en Roma, Times Square...

Evidentemente, esto no sustituye la experiencia de viajar pero es un lujo poder ver mundo a coste cero, satisfacer tus curiosidades más surrealistas del tipo cómo será una playa polaca (verídico) y todo en un momento de aburrimiento en el trabajo, sin desplazamientos. Como Google Earth no descansa, la versión Beta del Google Earth 5 promete explorar los océanos y ver las ciudades en distintos años, pudiendo ver así la evolución de cada una... también participan en el proyecto de montar una especie de Google Earth de la Roma antigua. Google me da miedo.

2 comentarios:

monsieur august dijo...

Tú sí que das miedo querido Lord. Me da que para tomar unas cañas contigo vamos a tener que hacernos una foto para google...
fascinante anyway

lord carnavon dijo...

Pues sí, espero que no tengamos que llegar a pedir a Google un Cañas 2.0.

Besos