
Desconocemos si son motivos contractuales los que obligan a, ejem, llamémosles así, Smashing Pumpkins a publicar nuevo trabajo, o es, sencillamente, cuestión de descarado cinismo de Corgan y compañía, eso sí, disfrazado de creatividad desatada. Desde Gesloten solo nos queda lamentar la falta de respeto de ciertos artistas por su propia obra. Y es que, a este paso, Smashing Pumpkins enterrarán su legado en el lodo, y en la vulgaridad de sus nuevas composiciones.
Lo dicho, que en 2008 tendremos más misticismo a lo Corgan, más túnicas imposibles, más estética inenarrable, más oscuridad impostada, más épica de todo a cien, y seguramente más conciertos soporíferos. Gracias Billy.
2 comentarios:
Tal y como ya comenté en el post de lo peor del 2007, musicalmente hablando, una pena que determinados grupos y solistas se obcequen en sacar como churros discos que no están a la altura.
Parece que quisieran matar al mito, pero en fin, en cualquier caso gracias una vez más por tu fino e irónico post.
Totalmente de acuerdo, Truman. En lo que llevamos de siglo, muchos grandes grupos y artistas no han hecho más que meter la pata una y otra vez. Para eso, lo mejor es dar conciertos de vez en cuando con el material antigüo de calidad, y no empeñarse en descender a los infiernos, como es el caso de Smashing Pumpkins. Más vale un "siamese dreams" a mano que cientos de despropósitos volando.
Publicar un comentario