
No entiendo por qué
Jose Luis
Guerín se empeña en llevar al cine el tedio de la vida ¿cotidiana? Ya tenemos bastante con no poder evitar el aburrimiento en la realidad como para acudir al cine a por un poco más. Puede que a los dieciséis años me hubiese fascinado esta película, antes de tragarme todas y cada unas de las verdaderas joyas (y de las que no lo fueron) de la “
Nouvelle vague”, pero hoy por hoy hace falta mucho más que ¿emociones contenidas? para mantener al espectador despierto. A veces la lentitud y la belleza se convierten en obras de arte (
In the mood for love de
Wan Kar Wai o cualquiera de los cuentos de
Rohmer) a veces incluso sólo la belleza puede resultar suficiente (
Maria Antoinnete de
Sofia Coppola) pero en éste caso ni la belleza de
Xavier Lafitte ni la de Pilar
López de
Ayala, ni las calles de
Estrasburgo son suficientes para mantener la mente del público en el contenido (inexistente) de éste
film y no queda más remedio que acabar contando las veces que se puede leer en las fachadas de la ciudad
Laure Je T’
aime o molestarse en buscar el origen de la música siempre
diegética. Por muy en el humor que se esté para ver un
film lento e
intimista a los diez minutos de En la ciudad de
Sylvia, el espectador reza porque el protagonista se tire de una vez a uno de esos tranvías (que obsesionan al cineasta) y termine con ese tormento de película. Le recomiendo a
Guerín que la próxima vez que se disponga a rodar se siente antes a escribir un guión.
3 comentarios:
Estimado Monsieur August, me pareces un poco masoca. No me hace falta verla para saber que debe ser espantosa. Esta pelicula apesta a rollo intelectualoide por los cuatro costados. Los gafapasta del mundo estan de enhorabuena. Apuesto que Guerín es de esos guays que luego van criticando por ahí al cine americano. A mí, personalmente, me parece mas digno, incluso bazofias como "Transformers" que este tipo de peliculas, no hablo ya de los grandes clásicos del cine americano.
En cualquier caso un post brillante, pero espero que al menos te la bajaras de emule, y no le dieras ni un centimo a tipos como este.
Querido Truman, no te falta razón pero, a veces, se encuentran pequeñas joyas disfrazadas de pestiño intelectual, aunque es cierto que la mayoría son pestiño disfrazado de pequeña joya. En cualquier caso creo que Guerín y sus amigos gafapasta están muy sobrevalorados
Hola. Quizás puedas encontrar alguna luz en la entrevista que hace unos días le realizamos a Guerín hace unos días, luego de presentar En la ciudad de Sylvia. Creo que tiene ideas valiosas que compartir sobre su obra y ciertos conceptos sobre el cine. Saludos.
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