viernes, 22 de agosto de 2008

OLA FESTIVAL: DECEPCIONANTES EMYIEMTI

Lo de MGMT es todo un fenómeno social. A pesar de actuar a las ocho y cuarto de la tarde la banda de Goldwasser y VanWyngarden era uno de los reclamos del Ola Festival. El secarral en el que se encontraba el escenario en el que actuaron se llenó de fans y curiosos que no se querían perder a la banda del momento.
Lamentablemente a pesar de la entrega y las ganas de pasarlo bien de la concurrencia, lo que prometía ser una auténtica fiesta se quedó en charletas y bostezos que sólo se vieron interrumpidos tímidamente con su último tema Time to pretend y contundentemente con el bis; Kids.
Es justo señalar que el sonido del escenario Movistar era pésimo, los graves retumbaban y ensuciaban una melodía absolutamente empastada y el volumen no era suficiente para disfrutar de un concierto al aire libre, pero también es cierto que MGMT no tuvieron su mejor día. Para los que asistieron a la actuación del Primavera Sound y les pareció lamentable tengo que decir que aquello fue gloria bendita en comparación con lo del Ola. Los chicos de Brooklyn parecía que se habían pasado con los estupefacientes, estaban lentos y nada inspirados, dejando en evidencia que algunas de sus composiciones no tienen la calidad suficiente y son mero relleno pero, y esto es lo peor de todo, ni siquiera sus grandes temas como The Youth, Pieces of what, Electric Feel o Time to pretend transmitían entusiasmo. Los fans solo enloquecieron con Kids, primer y único bis que interpretaron en solitario Goldwasser y VanWyngarden con la música pregrabada. En ese momento la arena en la que se encontraba la audiencia formó una nube inmensa de polvo que, a pesar de lo molesto, le daba cierto encanto y aire de jolgorio a la situación.
En mi opinión ya va siendo hora de que MGMT se empiecen a sentir cómodos en el escenario y busquen la fórmula para arrebatar a sus incondicionales como lo hacen con su magnífico Oracular Spectacular. Tienen ya tablas como para convertir el escenario es una fiesta pero, en esta ocasión, solo parecían un montón de chiquillos pasados de porros que acababan de llegar de la playa con la indumentaria que encontraron en un vertedero hippie y que estaban deseando terminar para atacar la sangría que se habían dejado a medias. Una pena.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Vi el final de su concierto. Tocaron sus tres hitazos "Time to pretend" que ya aburre, "Electric feel" y "Kids" todo ello rodeado de hippies pasados, fumadísimos, de unos 45 años y que apestaban de no ver una ducha en una semana. Bailaban haciendo como una danza africana para invocar a los espíritus de la lluvia. Horrendo. Jamas podré disfrutar nunca mas de este grupo.

monsieur august dijo...

Es cierto que el público es fundamental para disfrutar de un concierto. En las primeras filas había un buen número de mamarrachos pero cerca de la mesa de sonido había gente más normal. En cuanto a la edad se veía de todo, desde guiris de 16 años, indies en sus treinta, viejunos... de todo vamos.
Alguno de los patéticos ha tenido la indecencia de colgar en youtube un video de su cuchipandi en el concierto.
http://www.youtube.com/watch?v=N0KRBEwRiEw

Anónimo dijo...

jajajaja... Monsieur buen final para una crítica... Le ha faltado pegarles un par de bofetadas físicas.

gaspashá gorkovskaya dijo...

Es posible que estos chavales sean buenos en el estudio pero no en el directo. Igual con el tiempo mejoran.