"ONLY BY THE NIGHT" EL DISCO MAINSTREAM DE KINGS OF LEON

“Only by the night” es el segundo disco publicado por los norteamericanos Kings of leon en un plazo de año y medio, apuntandose a esa tendencia de publicar un disco cada año, ahí tenemos a Kanye West, Kaiser chiefs, Travis, Britney o Coldplay, que rizando el rizo lanzarán nuevo material estas navidades cuando “Viva la vida” continua arrasando en medio mundo.

El cuarto disco de Kings of lion viene precedido, además de un cambio radical en la imagen de la banda, de un single rupturista, más cercano al pop que su sonido anterior, esa “Sex on fire” que ya ha alcanzado el nº1 en las listas británicas habiendo bajado el volumen a las guitarras. Y una vez escuchado este “Only by the night” podemos asegurar que ese es el camino que han escogido el cuarteto. Estamos ante un disco sorprendentemente pausado, fronterizo con el pop edulcorado, terreno donde no dudan en meterse hasta las rodillas de vez en cuando (“Be somebody”) y que por tanto se olvida de las coordenadas del rock polvoriento (pero que era un poco de pacotilla, por supuesto...) por rutas del medio oeste americano (apenas las recuerda “Cold desert”) con las que nos aburrieron, pero también nos hipnotizaron y nos hicieron vibrar en su anterior disco, el irregular “Because of the times”. Muchos fans del grupo de Nashville se preguntaran si estamos ante el mismo grupo que sacudió la escena rock americana con “Aha shake heartbreak”. Solo la personal voz de su líder es asidero para convencerles de ello.

“Only by the night” es un disco pretendidamente ambicioso, abiertamente sobreproducido por Angelo Petraglia y Jaquire King, de unos músicos que quieren ser “grandes” como no dejan de repetir en cualquier entrevista promocional que cae en nuestras manos. Por desgracia las canciones solamente acompañan puntualmente. La sugerente “Closer” que abre el disco y los medios tiempos llenos de belleza y magnetismo, y tambien, ejem, sentimentalismo que nos encontramos hacia el ecuador del disco (“Use somebody”, “Manhattan” y “Revelry”) no son suficiente para convencernos de la validez del cambio. Cuando el disco finaliza ha sabido a poco. Es un disco tan lento, que incluso los contados momentos supuestamente vibrantes (“Sex on fire” o la definitivamente aburrida “Crawl”) palidecen hasta parecer baladas de Celine Dion frente al torrente de energía y emociones proporcionadas por sus grandes temas pasados (“McFearless”, “Fans” u “On call”). Tampoco ayuda a entusiasmarnos con estos renovados Kings of leon la estructura confusa de la mayoría de sus temas, sin estribillos claros, y con la sensación en el oyente de que algunas canciones navegan a la deriva (“I want you” o “17”), ni unas letras que afrontan el romanticismo y las rupturas abrazando todos los tópicos posibles, combinadas con momentos un poco embarazosos como cuando aseguran ser una “maquina de bailar” sin asomo de ironía.

“Only by the night”, en definitiva, se debate entre el aburrimiento y el interés de no pocos pasajes. El disco mainstream, incluso easy-listening por sonido e intenciones de la banda, resulta alarmantemente poco comercial como tal y carente de gancho en las melodías aunque no le faltan canciones interesantes, pero debieron esperar a contar con mejores temas y mayor claridad de ideas antes de entrar al estudio, y de esta forma su giro formal hubiese resultado mucho mas estimulante y convincente y no se hubiese quedado a medio camino de todos sus objetivos.

CALIFICACIÓN; 6/10
LO MEJOR; Es innegable que tiene cuatro o cinco canciones muy buenas, y el disco en conjunto resulta fácil de disfrutar. Su portada.
LO PEOR; Aún disfrutándose resulta bastante indiferente y no apasiona en ningún momento.
RECOMENDABLES; “Use somebody”, “Manhattan”, “Closer” y “Revelry”.